Sabias que todos tenemos una alta probabilidad de experimentar el espolón calcáneo en alguna ocasión?
ESPOLÓN CALCÁNEO.
DOLOR DEL TALÓN
El espolón calcáneo es una excrecencia ósea puntiaguda que se forma sobre la parte inferior del hueso del talón llamado calcáneo. Esta excrecencia resulta de la inflamación de la fascia plantar, que es la membrana fibrosa gruesa que conecta el calcáneo (hueso del talón) a los dedos del pie, la inflamación de esta membrana se denomina fascitis plantar.
Los espolones aparecen principalmente en dos áreas diferentes del pie: debajo del talón (espolón calcáneo inferior o espolón calcáneo plantar) y en la inserción del talón de Aquiles (espolón calcáneo superior)
El espolón calcáneo se presenta con bastante frecuencia de entre el 10 y 15 % de la población general. No obstante, en muchos casos se diagnostica por casualidad y no manifiesta síntomas clínicos ni molestias. Es más frecuente en mujeres de entre los 40 y 60 años.
ORIGEN
El espolón calcáneo está provocado por la presión y tracción derivadas de un sobreesfuerzo y del uso de calzado inadecuado: la sobrecarga puede someter a la aponeurosis de la planta del pie (fascia plantar) en su punto de inserción en el talón a tal esfuerzo que se producen pequeños desgarros, lo que irrita el tejido circundante o el periostio. Se produce así una inflamación dolorosa y localizada, la fascitis plantar. Como consecuencia el organismo almacena calcio en las zonas afectadas, probablemente con el objeto de reparar los pequeños desgarros de los tendones. De esta manera se va formando paulatinamente el espolón a lo largo de los tendones. Por otro lado, también puede aparecer un espolón calcáneo congénito que, a largo plazo, irrita los tendones y provoca una inflamación.
La práctica de deporte especialmente intenso sin estar entrenado, el sobrepeso y la obesidad, las posturas incorrectas del pie y el trabajo físico excesivo o la obligación de pasar muchas horas de pie en el puesto laboral.
Síntomas
Los espolones pueden ser sintomáticos o asintomáticos, en algunas ocasiones se descubren por la realización de una placa de rayos x, pero en otros pacientes su sintomatología es característica de dolor en el talón, preferente en las mañanas, los paciente lo refieren como sensación de pisar un clavo lo que genera dolor que se incrementa con la marcha.
El espolón calcáneo superior (deformidad de Haglund) se manifiesta fundamentalmente por medio de dos síntomas: dolor opresivo al palpar el talón de Aquiles y dolor provocado por esfuerzo en dicho tendón. La presión originada por el borde del calzado hace que la piel se enrojezca u se inflame.
Causas y factores de riesgos
-Práctica deportiva intensa (especialmente las carreras y los deportes que solicitan la articulación del pie, como el balonmano y el baloncesto).
-Caminar o estar de pie por periodos prolongados y repetidos.
-La edad.
-Sobrepeso y obesidad.
-Pie plano.
-Uso de zapatos inadecuados (suelas y tacones muy finos o tacones demasiado altos).
Diagnóstico
El diagnóstico del espolón calcáneo suele efectuarse en base a las manifestaciones que refiere el paciente, molestias características como dolor, que se incrementa con la marcha, Estas molestias pueden aparecer antes de que se haya formado la protuberancia ósea, la radiografía lateral del hueso calcáneo permite evidenciar el espolón como una protuberancia puntiforme orientada hacia los dedos y con una longitud de entre uno a cinco milímetros.
Tratamiento
El espolón calcáneo requiere tratamiento cuando se presentan manifestaciones clínicas (dolor), pero si se diagnostica producto de una radiografía del pie por otra causa y no hay síntomas no requiere tratamiento alguno.
Tratamiento
En principio se puede tratar mediante plantillas que elevan ligeramente el talón y descargan la zona de tensión.
También las infiltraciones con corticoides en el punto de dolor son efectivas en muchos casos.
Solo en aquellos casos que no disminuye la sintomatología, a pesar del tratamiento medicamentoso y de terapia física, se opta por el tratamiento quirúrgico, despegando la fascia de su lugar de origen en el talón. Algunos profesionales también extirpan la calcificación que aparece pegado al calcáneo. Hay que insistir en el hecho de que no es esa calcificación lo que duele, sino la fascia que se origina ahí.
TRATAMIENTO DE REHABILITACION
Fisioterapia
El paciente debe ser evaluado por el medico Fisiatra para que indique el plan de rehabilitación y trabajar en equipo con el fisioterapeuta.
El objetivo inicial es disminuir la inflamación. Luego se fortalecerá los músculos del pie para que presten soporte a la fascia plantar debilitada.
Lo más importante es reposar y disminuir la actividad física o el ejercicio.
Crioterapia: El masaje con hielo preferiblemente un par de veces al día o al menos una vez al final del día. Se puede llenar una pequeña botella de plástico con agua y congelarla. Hacer rodar el talón y el arco del pie sobre la botella durante unos 20 minutos proporciona masaje, estiramiento y frío.
También podemos acudir al uso de Electroterapia para proveer analgesia y ayudar a disminuir la inflamación. Tratamiento local con ultrasonidos.
Tratamiento con ondas de choque: es el tratamiento de elección, las ondas de ultrasonidos de alta energía (llamadas ondas de choque extracorpóreas) estimulan el crecimiento de los vasos sanguíneos, mitigan la inflamación y disminuye el dolor. Además disuelven las calcificaciones. El tratamiento no es invasivo, se realiza alrededor de 3 a 5 sesiones, 1 sesión semanal, con excelentes resultados.
Se debe tomar en cuenta que cuando haya cedido la inflamación y el dolor se debe realizar ejercicios de estiramiento y fortalecimiento para así brindar protección al pie
EJERCICIOS
✓ Colocar una toalla en el suelo y tratar de acercarla hacia ti con los dedos del pie. Puedes colocar algún elemento pesado encima para que ejerza resistencia.
✓ Puedes también realizar estiramientos apoyándote con las manos sobre una mesa, flexionando una rodilla y estirando la otra. Deberás inclinarte hacia adelante, como si quisieras mover la mesa, para estirar los músculos de la pantorrilla de la pierna estirada. Mantén la posición durante unos 10-15 segundos.
✓ Mover el pie adolorido lentamente arriba y abajo sobre la espinilla de la otra pierna. Se debe tratar de rodearla con los dedos.
✓ Subir escalones apoyando la parte del ante pie ayuda a descongestionar la presión ejercida en el talón.
✓ Andar en puntilla para que el ligamento de la fascia plantar no soporte tensión y se contraiga.
✓ Hacer rodar una pequeña pelota con la planta del pie también será beneficioso.
Otras ayudas que podemos tomar en cuenta son:
Taloneras y órtesis: Existe una gran variedad de almohadillas para el talón o taloneras, y generalmente son muy útiles. Los soportes blandos de silicona son los más eficaces.
Calzado: Los zapatos con tacón bajo, blando y amplio, proporcionan la máxima comodidad y protección. El calzado deportivo es recomendable.
Vendajes: La aplicación de vendaje neuromuscular (Kinesiotape) se aplican las vendas en toda la longitud de la planta del pie y es muy eficaz, ayuda a reducir la, presión del tejido inflamadodisminuyendo el dolor, logra efecto tonificante y relajante, especialmente para el dolor agudo y la actividad deportiva.
Férulas nocturnas: Las férulas nocturnas mantienen el pie extendido a nivel del tobillo, y son un método eficaz de tratamiento.
Yesos: En casos extremadamente agudos o resistentes, la colocación de un yeso de marcha corto durante tres a seis semanas aliviará y ocasionalmente solucionará el problema.
Cirugía: Rara vez está indicada. Sin embargo, tras 6 a 12 meses de tratamiento conservador, una liberación quirúrgica parcial de la fascia plantar puede estar indicada. La recuperación tras la intervención generalmente es lenta, a menudo no produce una curación completa, y puede presentar algunas complicaciones.
Es muy importante que después de la cirugía, el paciente realice tratamiento de rehabilitación para evitar contracturas y asì brindar protección al pie.
EVOLUCIÓN
Un espolón calcáneo tratado tiene por lo general una evolución favorable, la mayoría de los pacientes mejora y puede regresar a sus tareas habituales, pocos pacientes requieren cirugía.